sábado, 19 de octubre de 2019

LAS MACARRONEAS DE LEPANTO: La macarronea de Juan Escribano




F. Gherardi y G. Coli, "Historia de la batalla de Lepanto"




2. 2. La macarronea de Juan Escribano.

Figura registrada en los ff. 189v.-190v. del ms. E-65. El copista original, Fr. Tomás Pinelo, se presenta como discípulo del autor: “De ead. re carmina confecta / a doctissimo magistro meo Joan. / Scribonio”. El poema consta de 50 hexámetros κατά στίχον.

2. 2. 1. Autoría.

Juan Escribano fue Regente de griego en el Colegio Trilingüe de la Universidad de Salamanca desde 1559, y se sabe que era vicerrector de dicho Colegio en 15661. Ben Rekers nos da la noticia de su procesamiento por la Inquisición de Valladolid en enero de 1575, en la época en que se va condensando en España la oposición a Arias Montano y la Políglota2. Tras pasar un año en las cárceles del Santo Oficio de la Inquisición de Valladolid, fue liberado sin pena infamante alguna3.

No parece que haya que dudar que el Juan Escribano autor de la macarronea que estudiamos es el profesor de griego arriba mencionado, tal como se puede concluir del título de un epigrama del propio Escribano que Pinelo incluye en su miscelánea poética copiada en el ms. E-65: “Epigr. 30 doctissimi mei praeceptoris Joannis Scribonii linguae Graecae eximii Professoris”, f. 1974.

Juan F. Alcina en su Repertorio registra tres composiciones de Juan Escribano5:

-Poema a Francisco Salinas, reproducido en Schott, p. 569.
-Poema macarrónico para las justas de Salamanca, 15746
-“Epig. 30. doctissimi mei praeceptoris Joannis Scribonii linguae Graecae eximii Professoris”, inc. “Vt radiis lustrat terras et lumine Titan”, B.A.H., ms. *E-65, f. 197.
A esta lista hay que añadir un soneto castellano incluído en el mismo ms. E-65, f. 187r.-188v. , que Juan Escribano presentó a la justa poética de 1571 en su sección de canciones españolas –con libertad de metro- a la victoria de Lepanto7. Pinelo lo recoje como “Soneto 6º. de mi Mº. Juan Escrivano”, y reza así:

El encogido invierno y congelado
Saca el verano alegre y placentero:
El obscuro nublado y aguacero
Hace el sereno sol mas deseado:
El mar con tempestad alborotado
Hace apacible el puerto al marinero
Mas dulce es la salud al que primero
Con luenga enfermedad fue fatigado.
España que con guerras y con muertes
Con casos desastrados afligida
Estabas tanto tiempo y sin consuelo
Agora mejor gozas las dos suertes
Mejores y mas raras que en la vida
A tierra concedió jamas el Cielo.

2. 2. 2. Contenido y estructura.

Como señala Márquez Villanueva, “el otro autor, Juan Scribonio o Escribano, describió de forma mucho más convencional la partida de la flota, arenga de don Juan y la inevitable carnicería de turcos”8. El poema, que tiene casi la mitad de extensión que el primero, se construye también según el modelo épico y se abre con una invocación a la Musa, que debe contarle al poeta los quebrantos sufridos por la secta mahometana a manos de Juan de Austria (vv. 1-7).

La narratio nos sitúa ante la partida de la flota (vv. 8-10). El almirante don Juan de Austria dirige una arenga a sus hombres en la que recuerda los agravios padecidos a causa de los turcos, y les exhorta a destruirlos en esa hora suprema (vv. 8-30). La escuadra, enardecida, ataca a los turcos (vv. 31-39), y se consuma la derrota de éstos (vv. 40-46). El poeta se congratula por la victoria y el augurio de hegemonía mundial de la casa de Austria (vv. 47-50).





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1 Cf. L. GIL FERNÁNDEZ, Panorama social del Humanismo español (1500-1800), Tecnos, Madrid 1997, 2ªed., p. 59, 379.
2 Rekers reproduce un fragmento de una carta a Arias Montano de uno de sus defensores salmantinos, Pedro Salinas, de fecha 29 de enero de 1575, en la que le comunicaba que la situación se iba volviendo cada día más tensa y que un profesor de griego, Juan Escribano, había sido encarcelado sin que nadie supiera por qué, pues se trataba de un hombre de buena reputación: “[...] Entre tanto, no quiero dejar de hacer saber a v. m. que esta semana envió aquí la Inquisición de Valladolid por un profesor de lengua griega, llamado Juan Escribano, al parecer de todos muy buen cristiano y de los que bien entienden, uno de los que mejor saben en España todas tres lenguas y las artes liberales y filosofía y el que mejores y más exquisitos libros tenía. No sabemos el mal si está en él o en los acusadores” (cf. B. REKERS, Benito Arias Montano, Taurus, Madrid 1973, p. 83 –Juan F. Alcina en su Repertorio indica la p. 59 tal vez citando por la edición original de Londres de 1972-). Recientemente, el conocimiento de la figura de Juan Escribano, nacido en torno a 1533 en Salamanca, ha sido ampliamente reforzado gracias al trabajo del Dr. D. FRANCISCO JAVIER RUBIO MUÑOZ, profesor en la Universidad de Salamanca, y autor de una biografía del profesor de griego ( La convulsa vida de un humanista olvidado. Juan Escribano, profesor de griego en la Universidad de Salamanca (1533-1590). Salamanca, Centro de Estudios Salmantinos, 2017 [Premio Villar y Macías]), y de sendos artículos sobre su proceso inquistorial (“La Inquisición en tiempos de Fray Luis de León. El proceso contra el bachiller Juan Escribano, regente de griego en el Colegio Trilingüe de la Universidad de Salamanca (1575-1576)”, Cuadernos de Historia Moderna, vol. 42, Núm. 1 (2017), pp. 107-127) y su vida en el Colegio Trilingüe (“La vida en el Colegio Trilingüe a través del bachiller Juan Escribano, catedrático de griego de la Universidad de Salamanca en la segunda mitad del siglo XVI”, CIAN-Revista de Historia de las Universidades, 20/2 (2017), pp. 335-358 - DOI: https://doi.org/10.20318/cian.2017.3945). Agradezco infinitamente al prof. Rubio Muñoz que se haya puesto en contacto conmigo para darme a conocer sus investigaciones.
3 Cf. L. GIL FERNÁNDEZ, o.c., pp. 380, 410.
4 Cf. J. F. ALCINA, o.c., p. 166. Pinelo se presenta además como discípulo del Brocense, y señala su estancia en el Colegio Trilingüe de Salamanca (p. 165).
5 Cf. ib., p. 72.
6 Observa López de Toro que, dado que el príncipe don Fernando nació el 4 de diciembre, los aspirantes contaban con un “plazo perentorio de ocho días” (o.c., p. 179). Juan F. Alcina da erróneamente como fecha de celebración de la Justa el año 1574 (o.c. p. 72 y 112).
7 cf. J. LÓPEZ DE TORO, o.c., pp. 180-181.

8 Cf. F. MÁRQUEZ VILLANUEVA, o.c., p. 275



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