viernes, 31 de agosto de 2018

LA MACARRONEA DE FRANCISCO PACHECO: La influencia folenguiana (II) Glosas marginales y ficción editorial.






1. Las glosas marginales en el poema de Pacheco y la influencia folenguiana.

Quizás la diferencia fundamental entre las copias localizadas hasta el momento de la macarronea de Pacheco son los sendos argumentos en prosa macarrónica a los libros de que se compone el poema (Z, f. 73v; H, f. 226v),y el nutrido cuerpo de glosas marginales o apostillas que se encuentran en el manuscrito de la Biblioteca Zabálburu (Z), y en el de la Hispanic Society of America (H), pero que están del todo ausentes en el de la Bancroft Library (B). En diversas partes de su último artículo conjunto Montero y Solís (que desconocían la existencia del ms. H, al igual que yo entonces la del ms. Z) no dudan en atribuir estos microtextos al copista de Z1, al igual que la noticia inicial sobre un personaje de la macarronea (Z f. 73r) y la nota final (Z f. 81r), donde el copista habla de su labor y da lugar y fecha de su copia (Sevilla, 7 de marzo [de 1586, se supone, coincidiendo con el año que consigna en el f.73r]). Si bien me parece lógico atribuir los textos de Z f. 73r y f. 81v al desconocido copista, estimo, por lo que veremos a continuación, que los argumentos a los libros, y, sin duda, la inmensa mayoría de las glosas marginales son obra del propio Pachecho. El descubrimiento posterior que hice del manuscrito de la Hispanic Society of America (ms. H), no ha hecho más que reafirmarme en este extremo, ya que contiene los argumentos, aunque corridos al final del manuscrito, y la casi totalidad de las glosas del ms. Z, aparte de otras no presentes en éste.
En la llamada redacción Toscolanense (1521) de las macarroneas de Merlinus Cocaius, pseudónimo recurrente de Teófilo Folengo pueden encontrarse también argumentos a cada libro en forma de dísticos elegíacos macarrónicos, y un profuso cuerpo de glosas al texto, rasgo inconfundible de esta redacción, y que ha llamado notablemente la atención de la crítica folenguiana. Estas glosas, ya presentes in nuce en la red. Paganini (1517), aparecen en esta segunda, como indica Isella Brusamolino, estructuradas con autonomía de microtextos2.

La razón de tal estructuración nos la da Giuseppe Billanovich en su fundamental biografía sobre fray Teófilo3. Afirma Billanovich que el fuerte meollo clasicista que había dado la escuela al joven monje Folengo le llevó a disponer la edición de sus macarroneas punto por punto sobre los ejemplares canónicos de las ediciones de los clásicos:

Era ritual, al menos desde las ediciones realizadas por los gramáticos romanos del tardoimperio (los cuales, por otra parte, repetían los modelos de sus predecesores helenísticos), que toda edición de un clásico se iniciara con un proemio con el De vita et moribus del autor, que aportara delante de la obra el resumen general, y luego, en la medida correspondiente, un argumento de cada libro o canto, y que estuviera guarnecida en cada página de un archipiélago de escolios. La escuela medieval heredó ese modelo, y los literatos que inauguraron la historia de la literatura italiana lo consagraron y lo impusieron […] La escuela humanística mantuvo también estos usos de la escuela medieval de retórica […] Y Teófilo Folengo fue educado por los modelos que la escuela le mostró como venerables y por los textos clásicos que los libreros y las bibliotecas le dieron a respetar como disposiciones canónicas. Por eso, Merlín ordenó las Macarroneas de la edición Paganini según esos modelos, y en las tornas en que perfeccionó dicho texto para la edición Toscolana, empeñó toda su seriedad de retórico, aunque acompañándola constantemente con el contrapunto en falseto de sus efusiones burlescas, para completar y perfeccionar aquellas disposiciones4.

Por otra parte, Ettore Bonora dedicaba un apartado de su clásica monografía sobre las macarroneas folenguianas al estudio de tales glosas explicativas. El crítico relaciona su desarrollo con la conciencia de las múltiples posibilidades del lenguaje macarrónico: "enriqueciendo mucho las notas marginales, Folengo no sólo ofrecía al lector el más precioso instrumento para la lectura no fácil de sus textos, sino que, haciéndose comentador de sí mismo, ponía más al descubierto las tendencias diversas, y, no obstante, convergentes de su vena de escritor: del juego intelectual e ingenioso a la intuición de un fondo expresivo más virginal y potente"5. A continuación establece Bonora una tipología: las glosas son, a veces, defensas –a la vez que explicación- del estilo, y, sobre todo, de sus licencias prosódicas6, o constituyen explicaciones de formaciones lingüísticas. Las glosas, sobre todo en este último tipo, se presentan como una prolongación de la comicidad del texto. Este rasgo se observa palmariamente en las que:
A) reconstruyen etimologías ficticias, como la de castigalatro "cáñamo" (cf. Baldus T IV 240: "canevazzus latine; castigalatro macaronice: ex ipso enim fiunt soghetti quibus ladri castigantur")7.

B) en las que presentan falsos reclamos a autoridades inventadas o clásicas, cristianas, árabes y humanistas (cf. Baldus T IV 229: "Nota, ut ait Servius, quod gens differt a brigata, nam gens intelligitur de maribus et foeminis simul, brigata vero tantum de masculis, quasi gens bragata, quae portat bragas. A in i vertitur, testatur etiam Diodorus"8)

C) y en las que acumulan sinónimos cómicamente transfigurados (cf. Baldus T IV 265: "reverentia latine; inchinus graece; cortesia caldee; bonavita hebraice; bombracton diabolice")9.
Tal aparato de glosas permitirá a Bonora descubrir en Folengo una vocación de filólogo10. Toda esta estructura heredada de la retórica medieval desaparecerá en las redacciones posteriores suprimida por el propio Folengo.

1.1. Clasificación de las glosas de la macarronea de Pacheco.

Los escolios de la macarronea de Pacheco se dejan clasificar, en su mayoría, en este elenco de glosas, lo que me lleva a pensar, primero, que son una clara imitación de las folenguianas, y, en segundo lugar, que son obra, al menos en su mayor parte, del propio autor de la macarronea, es decir, el eclesiástico humanista Pacheco, al que debieron entusiasmar todas estas humoradas pseudoeruditas.

Estimo que la clasificación de Bonora debe ser ampliada, incluso para el caso folenguiano, con un tercer tipo de glosas no lingüísticas de pretensiones enciclopédicas e irónicas. Ofrezco a continuación la enumeración de las glosas de la macarronea que nos ocupa, clasificadas según este esquema, indicando circunstancialmente su presencia exclusiva en alguno de los dos mss. (Z o H):

A) Glosas valorativas de estilo, contenido y licencias prosódicas:

1 Plus adamate mihi quam dulcis gana cagandi Dulcissimus poetae amor in quo Vergilium et Homerum longe superauit, vt in multis alijs
38 tres reboçadas Michaelis in antra tulerunt tres reboçadas, mira nostri poetae honestas qui de rebus tam turpibus agens tam sancte loquitur.
50 factus homo est, Deus ipse, qui nostra piaret Versus deprauatus
72 Quantus honos, pax quanta sacris, quam magnus in illa cedite Romani scriptores, cedite Graij, hic versus n<oster> est incomparabilis.
109 insignis Papias panchoque Hugutio gordo Cathalogus grammaticorum illustrium quorum memoriam hic malevole Poèta proscindit ut illis de more est sed vide meam Apologiam pro grammat<icis>.
176 Non ego taymadus vel tontam fallere guardam? sup<p>le: possum (Z)
187 (ay dolor) atque nouas in nos agit vsque peleas pathos mouet.(H)
222 stat iuxta muros callegis plena rebueltis topographia burdelis; quam mihi displicet vt tam exacte sciat poeta noster!
312 aut solet ad flumen machos carreare villanus cum video hanc comparationem incago Vergilio et Homero.(H)
316 (namque Diablus eas fecit parecere pulchras) respondit tacitae objectioni, dixerat namque viejae, feae et deformes non poterant ganare quatrinum.
322 Per tacitas tenebras, et amica silentia templi bonus quandoque dormitat Homerus.(Z marg.laeuo)
323 andabant, nymphasque manu retocante lleuabant versus leoninus pater poeta (Z)
369 atque roçagantes patres gordosque priores Videtur Poeta çentire parum pie de fratribus et prioribus quod mihi valde displicet sed non ut reor de alijs quam de gordis, non de macilentis et tenuibus.(H)
399 obscuris tenebris castum narrare poetam saltem Ipocritam.(H)
413 Quid memorem quanto ristrabant robore lanças obscenum narrare hoc poeta docet.(Z)
434 per tajos, Carrança, tuos, metuende, brauosos per tajos. Hic versus est meo judicio suppossititius et nothus.(Z)
499 Per quas heu quantos facis incornare maritos nimis satyriosse bene loquitur.(Z)
524 officioque tuo francessae tubera sarnae quanto melius et exactius de his ego scripsi.(H)
526 Scilicet, omne animal tauano picatur ab isto Sic dixit in Satira yo no se que moscon, tabano o antojo ha picado a estos asnos en el rabo que ansi respingan con tan nueuo antojo. (Z marg.laeuo)
Iuvenalis. / unde haec, pater Quirine, tuos pupugit urtica nepotes? (H)
535 arrechat, picoque fero, et spolone cruento arrechat per translationem admirabilis propietatis modus.
594 toscus homo est. Valeant vrbes vrbanaque goza dixit supra gozos hic goza vrbana; licentia poetica quae genus permutare licet (Z)


B) Explicaciones de formaciones lingüísticas.

B1) etimologías ficticias:

9 Nostra Priapeias describunt carmina daifas Daifa dicitur quae pretio venditur, vt si dicat amanti: da et fac.
18 me lira, me cantus, me çapateta iuuat çapateta, nomen per onomatopeiam, fictum ab illo sonitu, tata : quem facimus manibus in çapato saltantes (Z)
193 quae mesurat eos, deuotio tota putescat putesco.is, verbum actionis (Z)
249 quod carcaxadas multas tibi pectore causet archaismus vox inusitata et situ confecta; recentiores dixere cachinnos
320 lumen dabat, densis vmbrantibus Cerea ramis filia Cereris Proserpina siue Luna et inde patronimice Cerea.
374 Sic ait: «o Badilon multum placet ista parola parola vox levantisca.(H)
500 per quas heu facis impreñare beatas beatas quia se beant. De his optime omnium scripsit Arciprestis Talaverensis, cuius verissima opera utinam familiarius usi essemus. (prima pars tantum Z)
507 in cosquillosae pelliscat ojamina crestae ojamen, is. Sed puto legendum hojamen ab illis hojis et cartilaginibus quibus componitur quam hic assumitur pro cresta.
584 Hoc quoque culipicas zumbare putabis abejas quia culo picant.

B2) Falsas autoridades:

10 et manflotescae furta iocosa domus Vnde puteria vocetur manflota vide Quintilianum 2. lib. Retho.
30 silleta residens, dum cairum ganat amanti Cairum appellamus tributum quod meretrices dant gaionibus vt refert Priscianus.
45 quique solent guimaros semper punire tacaños Tacaños vide Vallam de proprietate verborum
130 sed tenebrae semper, semper mala grimaque pauor Grima vox antiqua, et quam bonus vsus expulit. Pacuuius, grima facit mentis multa falsa percipere.
163 baladro caua saxa mouet, sonat ima tumultu Baladrus, vox terrorem significans, sed cuius vsus nescio apud quem probatorum inuenitur praeter Felicianum de Silua in Daraida et Garaida.
255 affectus etenim merdosos causat amanti Merda, ae. cuius deriuata quaere apud Papiam.
357 I, pete exercicios, et te theatinus açota Teatinus est animal ambigui generis, non enim est laicus, clericus, frater, nec heremita, et tandem omnia istorum oficia fungitur, et prouentus adipiscitur, vide opusculum meum de teathinis.(Z; scissum in H)
454 ire iubet, fessas potius quam carnere hartas carne. inis declinabant antiqui melius quam caro carnis. M. Varro de re rustica.
520 Per te bubarum hospitio bona renta cadaño cadaño aduerbium temporis Liuius deca. 1a. creabantur cadaño consules duo de patribus et quiritibus. (et c. Z)
551 de longe vidit burram furiale rebuznat rebuznare teste Columella est proprium asellis sed maribus tantum. Josquinus 3. de Armonia asserit vox asini scandere usque ad decimum et quartum punctum. (altera pars tantum H)
564 floribus esmaltas, viridante Maya, riberas viridantus .i. prisci declinabant. (Z)
570 Per virides sotos parlera calandria cantat Cum Calandria et Alondra sint idem teste Plin<io>, Vegetio et Gumiele, autor Veronus tam philosophe quam poeta diuisit eas.(Z)

B3) acumulación de sinónimos cómicamente transfigurados:

29 gaudetis, dum daifa canit, dum guimara chirlat guimara grece quod puta hispanice
119 et çulla et viridi crinem redimitus adelfa Çulla, herba qua Xericij equi sanguinantur. Adelfa chaldayce, punice Rodaphnem.
298 Ante istas çurrapa Venus, et tetuda videtur Italorum lingua, alcagueta Hispanorum.

C)glosas enciclopédicas, irónicas, y de realia:

4 non Theatiniacis auribus ista damus Quasi dicat Midae a<u>ribus
14 Nulla quidem sicco haec ingle beata leget habent enim Beatae ingles caeteris mulieribus humidiores causa vicinitatis vberrimae fontis.
15 Ad frailes andate graues quibus ore repulgus de frailibus consule Erasmum in Moria
24 non scribentis culpa, legentis erit escusatus abilis
25 Ridiculae Musae, furfantis numina vulgi Inuocatio
31 esto mei memores, seu vos Tagaretides vndae Tagaretus quasi Tagus chicus fluit propter barbacanas Seuillae in cuius alueo Nimphae et Musae Macharronicae, vt fama est, inhabitant.
37 quo modo tres sancti garzones nocte silenti Praepositio
40 Multi multa ferunt de tanto ludicra casu Narratio
63 quam chorus iste tuus, terrarum reyna Seuilla caeterarum patientia.
68 qua Villada manu cantantibus organa pulsat Villada organista peritiss<imus>.
69 et quo contraltu Guerrerus in aethera dulcis Guerrerus pater canentium.
88 bufat amore carens taurus, per vasta Xaramae Vbi tauri ferocissimi
90 Est locus infelix, casa lobrega plena ratonis Descriptio colegioli S<ancti> M<ichaelis>
101 Hic Parnassus eis, lindas hic ducere danças De Parnasso et Castalio fonte noua opinio apud geografos modernos
121 et Michaelino tantummodo cedis alumno Michaelino alumno et Franciscus Sanchez, grammaticus purus qui tunc temporis sedebat super cathedram pestilentiae illius colegij et quem in toto hoc opusculo miro liuore poeta prosequitur vt videbitis.
134 cumque pelambre bubae morant, et iniqua calambre De bubis, lege tres lib<ros> meos, cuius titulus est de grillimone sudando quos scripsi dum sudarem fortissime.
149 barbarico cum patre domum; sacra templa reliquit Barbaricus pater Franciscus Sanchez infelix.
156 Guarda Solecismus (sic illum nomine dicunt) Solecismus custos Diaboli
160 omnia sancheo conspurcat visa hedore Aliud schema.(H)
164 sima graui, tiemblatque locus cum soluere tientat sima locus profundus et ad Tartara tendens.(Z marg.laeuo)
205 ad Veneris volat ille domum, nam carmine constat nescio quo. (Z)
211 semper habens dulci tinctas in melle sagitas melius, et dulcius in sa<c>charo, poeta bastarde.(Z)
214 altera bastarda est, bastardos causat amores mater putarum
220 Hanc ergo Luzbellus adit, quam ferrea porta sic vocatur quaedam porta Hispalensis burdelis
224 forçantur, Venerique deae dare nobile sueldum melius 'mobile', nam lumborum et clunium mobilitate meritur.
234 Sic dea, sic Luzbel: “lindae princesa cohortis captatur beneuolentia ab potentia
236 heu quid agis, tantoque sedes tam lerda reposo? arguit eam ab honesto
239 siles atque sedes, nec quartum triste lucraris? silet alegunt alij (Z)
243 si sanctos turbare viros, si fallere multos indicat quod vult
244 forte cupis, multosque cupis ganare reales ab utilitate
245 quo fieri possit pacto te, nimpha, docebo profert modum
256 Huic lagañosos rodilla tapauerat ojos rodilla, harapus qui interponitur, inter caput et onus (Z marg.laeuo)
266 Et cecam et mecam puterias currerat omnes de ceca et Meca vbi visitur pernile Mahomae; vide Strabonem de situ orbis
273 Talibus ornatae digijs (comitante Diablo dix digi, ...sed quae oculos alticia (Z)
281 Solus Fernandus, solus Badilonus ipse Fernan Perez et Antonius Gonzalez canonici. (Z)
282 non cantat, sed roncat hians, et cantica turbat Alea quippe ludentes non dormierant nocte praeterita.
293 vos, floxi, mugerile genus, miseraeque mariquae Marica. ae. nomen vituperosum et quod vilitatem arguit.
297 quas nemo gustauit adhuc; venere Toledo vbi sanctissime colitur pudicitia a mulieribus.
303 et manflotiuolo baheauit atincare vtrumque satirio et atincar quibus maxime roborantur nerui.
304 Iam se sperezat, multumque vocezat vterque Galenus lib. 2 de priapismo ait, cum videris hominem sperezantem, voçezantem et spuentem viscose, signa iudica vehementissime tensionis circa genitalia.
324 Itur in obscuram grutam, stabula alta putarum colegium sancti Michaelis (Z)
328 Ecce venit quidam, quem dicunt nomine Sanctum Racionarius Armigius (Z)
331 liquerat et moças, et auari facta Tabordae Bilhan et Taborda lusores clarissimi, qui ob illustria facinora meruerunt principatum obtinere lusorum.
391 Vt cecidit quondam scala Calistus ab alta De Calisti morte, Melibeae et Caelestinae feci -- elegias tres quas tipis mandabo citus excudendas.(Z)
404 Portius, et quantos matat Bernale modorros Portius mutato nomine de te fabula narratur Francisce Sancij. Bernale, boticarius et postea medicus aut potius mulomedicus. (altera pars tantum H)
407 aut tragat Alcides quot pastelicida placentas ...fateor ignorare quid sit. Alcides pastelicida de fortissimo viro Carrança loquitur vates temerarius.(prima pars tantum Z)
409 ille, Çamora, tuus (sic dij voluistis) obispus .D. Joannis Manuel tunc episcopus Çamora. (partim om. H)
426 Baionae ad legem multos pegauit açotes ad legem Vayonae açotantur sclaui et est certus modus ligandi acommodatus sinus percussori. (Z)
429 Ergo ego mando tibi per cartapacia Soti quidam gramaticus (Z)
432 per cabalisteos numeros, secreta verenda inuehitur in quendam amicum dicentem çabalam.(Z)
433 per coplas, Burguille, tuas, floxosque sonetos Burguillus vulgaris poeta --- potius in glosis et redondillis facile princeps.(Z)
436 ille vocandus erit nota feritate Lycaon iterum refricat aceto et sale nigro misellum F. Sanchez.
448 pulgonemque trucem et frustrantes viñam queresas pulgo et queressae genus beluum rodentes tenellos pampinorum. [Atque legunt: et frustrante vinea quaeressas, quasi frustrantes opem vinorum.] (altera pars tantum Z)
456 castos atque pios sacrae ratione prebendae ne corrumpatur, carne profert, eam aliquando subdio.
466 deffixi in terram, quos mascara tristis inumbrat de alumbratis agitur et semitheatinis, quod satelites rigidi virtutis cum appareant, tandem Aristippi precepta furtim relabuntur. (altera pars tantum Z)
481 et ventum pluuiasque pati, ferumque serenum o quoties mihi contigit! (H)
488 aut studiantus eis rapit irreparabile virgum id est nal’r (Z)
510 ahorcare habitos facis, et saltare paredes patientia mihi qui hoc fratesco morbo laboro ab incunabulis.
549 donec equae empujans telum tripedale recondit O ego infelix cui nondum est sesquipedalis pugiolus!
592 sponte sequar, faunos inter satirosque cachondos salaces homines... (Z)
632 non etiam possunt gelidis delphines in vndis [Alude si los delphines mueren de amores] (Z)


2. La ficción editorial de Aquario Lodola en las macarroneas folenguianas: descripción y comparación con el editor ficticio de la macarronea de Pacheco.

Antes de concluir con el estudio de las influencias de las glosas folenguianas en las de la obra del licenciado Pacheco, me parece necesario recordar el complejo modelo editorial que ofrecían las macarroneas desde la primera redacción, la llamada Paganini (1517) por el nombre de su impresor y editor real, Alejandro Paganini. Y digo real, pues en la parodia virgiliana que construye Folengo no puede faltar la figura de un émulo de Servio, aquí un Acuario Lodola11 (Magistri Aquarii herbolatti in arte cristeriensci peritissimi como se afirma en el prefacio epistolar en el que cuenta el fortuito descubrimiento de la obra de Merlín Cocayo) que antepone un arrogante Libellus de laudibus Merlini Cocai, y adorna el texto con un docto mas discreto aparato de glosas explicativas, impresas en sus márgenes exteriores.

En la subsiguiente redacción Toscolanense (1521), los textos (como el nuevo Epistolium colericum, dirigido por Acuario a un colega, al que atribuye la defectuosa y espúrea edición que es para él la Paganini, y que imita las atrabiliarias disputas entre eruditos) y glosas atribuidas a Lodola se verán aumentados, para desaparecer por completo, junto casi con la figura del editor ficticio en las redacciones Cipadense y Vigaso Cocaio12.

Siguiendo la estela de Luca Curti, que distinguía en la macarronea entre una “primera persona” (el autor efectivo de las macarroneas, Teófilo Folengo, modelo de latín humanístico), y una “segunda persona” macarrónica (el autor ficticio, Merlín Cocayo, que escribe como no se debe, y es ofrecido a la irrisión de los cultos lectores a los que va dirigida la obra), para asegurar el juego paródico sin malentendidos, Giorgio Bernardi Perini se pregunta si no será necesario ver en Aquario Lodola una “tercera persona”13:

[…] Se il poeta Merlino rivendica attraverso la deformazione macaronica il latino maltrattato dagl'indotti, Acquario Lodola rivendica a sua volta, tramite la caricatura dell'erbolatto-filologo, il profilo del dotto umanista, scopritore, editore e commentatore di classici: una figura malamente incarnata nella realtà dai protagonisti di quelle rissose e meschine baruffe che avevano intristito, anche e sopratutto ad alti e conclamati livelli, la stagione più fervida dell'umanesimo.

El profesor Bernardi apunta a uno de estos eruditos conocidos por sus ácidas controversias, Giorgio Merlani o Merula (1494), como posible modelo para el Aquario folenguiano, y apunta una posible clave onomástica en apoyo de su teoría14.

Sea como fuere, esta tríada constituida por el autor de la macarronea, el autor macarrónico y el editor erudito era de difícil traslado para los diversos imitadores del rico universo macarrónico folenguiano; mundo complejo, pero cerrado en sí mismo, por sus propias ansias de perfección y absoluto. Los siguientes escritores de macarroneas -y con más motivo los no italianos- no podían sino imitar parcialmente este vasta creación paravirgiliana.

Así, los autores españoles de macarroneas no sienten necesidad de crear ni pseudónimos (salvo el Merlinus del poemita gaditano del siglo XVII) para sus poemas de circunstancias, ni editores para sus ocasionales glosas (caso del autor anónimo del emblema macarrónico otiositas vitanda a comienzos del s. XVII o Francisco Sánchez Barbero en 1812). Una excepción en este último apartado parece constituirlo la macarronea de Francisco Pacheco. Éste, efectivamente, firma el atrevido y procaz poema con su nombre, pero en cierto número de glosas el autor de éstas habla del autor de la composición en tercera persona, frecuentemente como poeta o poeta noster (cf. supra glosas del tipo A, vv. 1, 38, 50, 109, 187, 222, 312, 316, 322, 323, 369, 399, 413, 499, 524, 535, 594, y gl. del tipo C, vv. 121, 211 y 436); en cierto número de estas glosas esta “tercera persona” editorial alaba a la “dualidad” autoral (ya que Francisco Pacheco no se ha desdoblado en ningún sosias macarrónico) (cf. A vv. 1, 38, 312, 499, 535), pero hay otras en las que el escoliasta ficticio censura al autor (cf. A vv. 50, 109, 222, 322, 323, 369, 399, 524, y C v. 211), e incluso algún caso ambivalente (cf. A v. 413). Estas glosas serán de especial utilidad para ilustrar la personalidad de la que Pacheco ha querido dotar a esta tercera persona macarrónica en su obra.

Pero antes me parece necesario establecer cuál es el punto de anclaje de las glosas de Pacheco con el aparato de escolios folenguiano; estimo que éste se encuentra en un calco textual, que tiene además un valor programático respecto a la personalidad del escoliasta de Pacheco. Me refiero a la apostilla al v. 38 tres reboçadas Michaelis in antra tulerunt, que alude a las tres meretrices que materializarán el engaño de Lucifer; el escoliasta glosa esta expresión: tres reboçadas, mira nostri poetae honestas qui de rebus tam turpibus agens tam sancte loquitur, que remite directamente a la glosa a Zanitonella T 6315: Mira poëtae honestas, qui hac de materia loquens tam immaculate transit ad confusionem impudicorum poetarum, que comenta los versos finales de la Sonolegia quarta en la que el rústico Tonello (estamos en el terreno de una parodia de la poesía amorosa de tono aúlico) alaba a su amada Zanina (a la que acaba de comparar candorosamente con una ágil cabra por su grácil baile) en una serie metafórica (Zan. T 63-64: Testa, manus, gambae, venter, pes, coppa Zaninae / sunt sol, luna, Venus, capra, leütus, opes). Lodola ensalza la admirable honestidad del poeta (Merlín Cocayo) que, al tratar de esta temática, transita con candidez a la locura de los poetas impúdicos, con púdicas referencias al físico de la amada16. El escoliasta de Pacheco retoma literal y paródicamente la glosa folenguiana en su escolio al v. 38 para alabar de un modo aparentemente ingenuo el que el poeta llame a las prostitutas «rebozadas» por ir cubiertas y ocultas, como si fuera un signo de pudor. El escoliasta alabará, asimismo, el estilo «demasiado satírico» por adecuarse al tema (nimis satyriosse bene loquitur17) en la glosa al v. 499: Per quas heu quantos facis incornare maritos; sin embargo, su alabanza en este aspecto puede resultar ambivalente en el caso del v. 413 (Quid memorem quanto ristrabant robore lanças obscenum narrare hoc poeta docet18), dado el relativamente elevado número de glosas críticas hacia el autor que se registran en los mss., sea hacia su estilo y métrica (cf. A vv. 50, 322, 323, 434, 524; C v. 211), sea hacia su actitud hacia los gramáticos (cf. A v. 109), los frailes y priores (cf. A v. 369), sea hacia la moral del poeta (cf. A v. 222, 399 y 413). Estas críticas, en las que se afirma la personalidad de una tercera persona macarrónica, son inusitadas en las macarroneas merlinianas. Puede compararse en este sentido la glosa al v. 222 en la macarronea de Pacheco (stat iuxta muros callegis plena rebueltis topographia burdelis; quam mihi displicet vt tam exacte sciat poeta noster!) con la glosa a Baldus T 219r en la descripción del Postribulum Striarum: En quomodo lupanar inhoestissimum honestissime descripsit Merlinus noster; el ficticio Lodola no critica nunca al autor macarrónico que edita y glosa según sus propios principios. Sólo he podido encontrar una ocasión en que Acuario Lodola marque diferencias ideológicas (cf. Baldus T 47r, v. 13: At cernendo fidem digiti, nomenque Gibelli Gibelizat noster poeta, patientia mihi, quia ex parte contraria sum) con Merlín Cocayo. Tras el escoliasta pachequiano, en cambio, podría decirse que se halla el retrado de uno de los patri seueri descritos en el prólogo, filólogo purista, torvo moralista y erudito él mismo autor de obras que cita y contrapone como modelo a la de Pacheco (cf. supra A vv. 109, 524, B2 v. 357 y C vv. 134, 391). Aunque en el caso de las tres últimas glosas volvemos a caer en el terreno de la ambigüedad, pues se habla de poesía amorosa, de obras sobre la sífilis que se da a entender que se ha padecido, y de un opúsculo contra los teatinos, difícilmente atribuibles a ese editor severo. Pacheco, que se adhiere a esa grammatica noua de Tifi Odassi, se deja llevar por su vis comica, y carece de esa obsesión en la construcción heterónima de Folengo, por lo que esa tercera persona macarrónica editora que apunta en su aparato de glosas se esfuma en ocasiones para dar paso a la voz en primera persona de Pacheco, sobre todo en las referencias más escabrosas (cf. C vv. 481, 510, 549). Puede afirmarse, pues, la existencia de varias voces en los escolios que están siempre al servicio de una mayor comicidad, a pesar de la apariencia anárquica.

Probablemente, esta falta de diseño unitario en la elaboración de las glosas ha contribuido al carácter azaroso de su transmisión, pues debe recordarse, por un lado, que están por completo ausentes de la copia apresurada y defectuosa del ms. B, y, por otro, que hay cierto número de glosas que sólo se encuentra, sea en el ms. Z, sea en el ms. H, o, incluso, parcialmente recogidas en uno u otro manuscrito. Así, las glosas que sólo recoge el ms. Z (cf. A 176, 322, 323, 413, 434, 499, 526a, 594, B1 18, 193, 357, B2 564, 570, C 164, 205, 211, 239, 273, 281, 324, 328, 426, 429, 432, 433, 488, 592, 632) son más numerosas que las que son únicamente propias del ms. H (cf. A 187, 312, 369, 399, 524, 526b, B1 374, C 160, 481), aunque algunos escolios de aquel ms. pueden ser atribuibles a su amanuense (cf. A 526a, C 239, 324, 328, 448, 632), que es quien proporciona más información sobre la propia macarronea, y su génesis, y cuyas glosas a los vv. 239 y 448 apoyan la impresión de que ha manejado diversas fuentes para su copia. Finalmente, algunas glosas se presentan incompletas, ya en el ms. Z (B1500, 551, C 404) ya en el ms. H (B2 520, C 407, 409, 448, 466).

3. Conclusiones sobre la influencia de las glosas marginales folenguianas en las de la macarronea de Pacheco.


Debe señalarse, asimismo, la menor atención en Pacheco sobre el tipo A (21) y B (24), que sobre el C (60), al revés que en Folengo, explicable por la obsesión del mantuano en la cimentación de su aparato lingüístico y filológico-paródico.

Tales características de los manuscritos demuestran la amplia difusión que conoció la macarronea de Pacheco, que nunca fue dada a la imprenta, de modo similar a la de la macarronea de Vergara, que dio también lugar a un amplio campo de variantes entre las fuentes.

Creo que puede afirmarse, pues, de modo irrefutable la influencia folenguiana en este cuerpo de glosas marginales a través de la redacción Toscolanense, y que tales, en su inmensa mayoría, deben atribuirse al propio autor.









1 J. Montero y J. Solís,’La macarronea’, pp. 648, 651, 655, 656, 662 n. 62.
2 cf. S. Isella, ‘Superficie grafica e strati linguistici nel ‘Baldus’ del Folengo: un esempio’, en G. Bernardi – C. Marangoni (edd.), Teofilo Folengo nel quinto centenario della nascita (1491-1991). Atti del Convegno. Mantova-Brescia-Padova, 26-29 settembre 1991, (Firenze: Olschki, 1993) 195-203 (p. 196).
3 G. Billanovich, Tra don Teofilo Folengo e Merlin Cocaio (Napoli, 1948).
4 G. Billanovich, Tra don Teofilo, pp. 177-179. Folengo llega a inventar un ficticio descubridor y editor de las macarroneas de Merlín Cocayo, el herbolario Acquario Lodola, que realiza todas las funciones editoriales enumeradas por Billanovich (incluso un explícito De vita et moribus Merlini Cocaii en la red. T) (cf. J. M. Domínguez Leal, ‘La primera redacción de las Macarroneas de Teófilo Folengo’ en José María Maestre Maestre – Joaquín Pascual Barea – Luis Charlo Brea (eds.), Humanismo y pervivencia del mundo clásico. Homenaje al profesor Antonio Fontán, (Alcañiz – Madrid: Instituto de Estudios Humanísticos – Ed. Laberinto – CSIC, 2002), III.3, pp. 1023-1036. Sobre Lodola, su función, evolución y onomástica cf. el excelente y reciente artículo de G. Bernardi Perini, ‘Identikit di Acquario Lodola (a proposito di onomastica folenghiana)’, Studi in onore di Pier Vincenzo Mengaldo per i suoi settant’anni. A cura degli allievi padovani. Volume I (Firenze: Sismel – Edizioni del Galluzzo, 2007) 467-478.
5 Cf. E. Bonora, Le maccheronee di Teofilo Folengo (Venezia 1956), p. 48.
6 Ofrezco algunos ejemplos de la edición facsímil de la red. T editada por A. Nuovo, G. Bernardi Perini, y R. Signorini en 1994 a iniciativa de la Associazione Amici di Merlin Cocai (Opus Merlini Cocaii poetae Mantuani Macaronicorum, Tusculanum Apud Lacum Benacensem, Alexander Paganinus, MDXXI, die V Ianuarii). Nótese cómo la ficción editorial de Folengo le lleva a hablar en las glosas del poeta en tercera persona: mira descriptio insaniae amoris (f. 16r); mire amoris insaniam poeta noster in hoc libello demonstrat, nam etiam rudis homo Tonellus qui nuper tam sbotazzate loquebatur, nunc eleganter asistens amice profatur quia nouas amor instruit artes (f. 19r); carmen truncatum semper fac accentum in vltima sillaba (f. 24v); tenerime loquitur (f. 25v); pulchra biasmatio amoris (f. 25v); nodo habet primam ad placidum (f. 35r); supra macaronice habet vltimam ad placidum. Sic erga, intra, iuxta. (f. 37r) valde, aduerbia in e macaronice longa et breuia sunt (f. 38v); Manbriani trisillabum est hac figura sepe vtitur poeta (f. 44r).
7 En otras Folengo advierte sobre la entidad lingüística de algunos macarronismos: na, verbum (f. 29v); Dedentrum aduerbium est, sicut de foras, dacantum, dabanda, dapressum (f. 35v), o explica su significado: biganbes duas ganbas habentes (f. 30r)
8 Un tipo particular parece constituirlo aquel en que Folengo/Lodola recurre de manera vaga a los antiqui para justificar cómicamente sus macarronismos: fo fas fat, antiqui vtebantur, vt etiam tro tras trat (f. 17v); antiqui dicebant significagare, et alia plurima per significare (f. 28r)
9 cf..E. Bonora, Le maccheronee, pp. 48-53.
10 cf. E. Bonora, Retorica e invenzione (Milano: Rizzoli, 1970) p. 76. Lucia Lazzerini sitúa las glosas en una tradición escolar (cf. "Aux origines du macaronique", Revue des langues romanes, LXXXVI, 1982, p. 26), y señala que el uso de notarios y abogados de glosar con frases del vulgar las fórmulas de los documentos legales, que genera un uso burlesco, constituye el antecedente más remoto de las (pseudo)glosas de sermones y macarroneas (cf. Eadem, Il testo trasgressivo. Testi marginali, provocatorî, irregolari dal Medioevo al Cinquecento (Milano: Angeli, 1988) p. 121). Silvia Isella incide en sus implicaciones lingüísticas: "sea esa reflexión [de las glosas] auténtica o, la mayor parte de las veces, paródica, revela, en todo caso, una conciencia muy sensible a las contraposiciones más "fuertes" de códigos lingüísticos diversos, e incluso a oposiciones más difuminadas, pero no menos significativas en el orden de la fonética y el léxico. [...] Se dan casos de oposiciones lexicales (tomadas de campos lingüísticos contiguos, dialectales principalmente, pero disimulados bajo nombres de lenguas 'otras') del tipo: 1) brenta chaldaice, zerla hebraice, mastellus arabice, soium latine; 2) truffare: decipere. Soiare, calefare, trepare, berteggiare, bertonare, tosare; 3) tortelli graece, casoncelli latine, rafiol hebraice -donde el juego sinonímico es una suerte de catálogo de 'possibilia' dentro de los que Folengo realiza su elección, a menudo exclusiva, y otras veces variable de zona a zona del texto. Y se dan, en cuanto a las oposiciones fonéticas, casos del tipo: lasenam mantuanice, sieam bressanice (variantes diatópicas del lat. AXILLA dentro del código dialecto) o la que opone el toscano al lat. y / o dialecto: chetus florentine quietus, giuro scribitur toscaniter, zuro macaroniter, iuro latiniter; megium toscaniter, medium latine; primaias Florentini dicunt primas sicut et denaium, notaium, rasoium; fonzus macaronice, fungus latine; giusum, zosum, deorsum sintéticamente alineados en su triple oposición" (cf. ‘Superficie grafica’, p. 196).
11 El editor y comentarista de Cocayo es un "herbolattus", es decir, un charlatán de feria, buscador de raíces y simples, y experto en lavativas. Su nombre, parlante, es especular del del autor: Acuario contra Cocayo que alude al vino (Bruno Nardi señala su origen en el mantuanismo cocài, "tapón de la botella" [cf. Saggi sulla cultura veneta del quattro e cinquecento, a cura di Paolo Mazzantini, Antenore, Padova 1971, p. 121]); Lodola ("alondra"), un pájaro que vuela alto, frente a la mirla (merla), de vuelo bajo y breve (cf. MARIO CHIESA, "Il Parnaso e la Zucca: la letteratura secondo il Folengo", Atti Convegno 1991, p. 54).
12 cf. G. BERNARDI PERINI, “Identikit di Acquario Lodola (A proposito di onomastica folenghiana)”, AA.VV., Studi in onore di Pier Vincenzo Mengaldo per i suoi settant’anni), Volume I, Firenze, Sismel-Edizioni del Galluzzo, 2007, pp, 467-478. El profesor Bernardi analiza la parva presencia de Lodola en estas redacciones, y la fortuna posterior del personaje (In complesso, Acquario Lodola e il suo strano mondo di erbolatti eruditi sono tuttora da restituire. La loro chirurgica amputazione fu del resto il riflesso di un già consolidato misconoscimento della finzione folenghiana, presa troppo sul serio non solo da ingenui lettori ma proprio dalla cerchia dei suoi esegeti [p. 474])
13 cf. G. BERNARDI PERINI, o. c., pp. 475-476
14cf. G. BERNARDI PERINI, o.c., pp. 477-478
15 Cito por la ed. Zaggia, p. 64. Puede verse la glosa en la ilustración que encabeza esta entrada tal como aparece en la edición facsímil de los Amici di Merlin Cocai, v. supra n. 6.
16No coincido con la interpretación del transit ad de la glosa que hace el prof. Zaggia: “va oltre [cioè “supera”, “si distacca da”] la 'confusione' dei poeti impudichi”” (o.c. p. 63).
17Esta glosa no aparece en el ms. H.
18Escolio no presente en el ms. H

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